La protagonista de la cinta va a recibir una herencia de lo más curiosa. Le han dejado una granja, pero no la típica granja norteamericana, sino una granja de árboles de Navidad.
Llega a la granja con la idea de venderla, ganar dinero y abandonar el pueblo para siempre, pero poco a poco va cambiando de idea conforme conoce a la gente del pueblo, una gente de la que se enamora pues se muestran muy amables con ella.
Esa decisión se afianza cuando conoce a Tucker, un abogado que la ha ayudado con los trámites y de cual se enamora, por lo que ahora sí que no va a salir del pueblo ni va a vender la granja.
Gracias a la herencia y a la Navidad esta mujer cambia de vida, dejando la ciudad para tener una vida mejor entre gente que la quiere y encontrando al que parece que puede ser el amor de su vida.